Es posible que te preguntes cuáles son las razones para incluir espejos en los ascensores. Pese a que los habrás utilizado infinidad de veces para verte en ellos, existen otros motivos prácticos por los que conviene tenerlos instalados en el interior de la cabina. Aunque pudiera parecer que su uso está asociado principalmente a la estética, uno de los motivos más importantes guarda relación con la claustrofobia y otro con la seguridad.
¿Qué utilidad tiene un espejo en el ascensor?
Hoy día no es difícil encontrarnos con un ascensor. De hecho, se hace raro ver edificios de varias plantas sin la instalación de uno de ellos. La mayor parte de las personas deben entrar en un elevador varias veces al día y casi todos los modelos tienen un distintivo que comparten: el espejo. ¿Qué provecho sacamos de ello?
- Seguridad. En realidad, fue el motivo principal por el que las empresas empezaron a añadir cristales. Los espejos resultan muy útiles para detectar robos o asaltos y, además, ofrecen mayor seguridad al disuadir a las personas a perpetrar actos de vandalismo. Y es que este sistema les hace sentirse vigilados, inhibiendo su conducta.
- Claustrofobia. No es ningún secreto. El tamaño reducido del ascensor a menudo provoca claustrofobia o miedo. Muchas personas se sienten inseguras al no conocer bien el mecanismo del ascensor o ante pensamientos catastrofistas sobre la falta de aire y demás. Pues bien, un espejo en un ascensor aumenta la sensación de amplitud del ascensor, lo que reduce notablemente el nivel de ansiedad.
- Accesibilidad. Las escaleras suelen representar obstáculos para los discapacitados que se desplazan en sillas de ruedas. Por suerte, actualmente contamos con diferentes alternativas para mejorar su acceso al ascensor como las plataformas salvaescaleras. Ahora bien, el tamaño del ascensor puede suponer otra barrera que impida la libertad de movimiento del usuario.
Colocar espejos en su interior facilita el manejo de la silla y poder retroceder o salir cómodamente del ascensor sin necesidad de tener que girar. De esa forma, mejora la calidad de vida de las personas con problemas de movilidad al mismo tiempo que previene accidentes.
- Entretenimiento y distracción. Los espejos nos ayudan a no aburrirnos mientras viajamos en ellos. Usuarios en todo el mundo los emplean para hacerse selfies y colgarlos después en sus respectivas redes sociales. También es una manera de mirarnos y terminar de arreglarnos cada vez que salimos apurados de casa. Esto hará que el viaje se nos haga más corto y distrae la atención para viajar con desconocidos sin tener miedo.
¿Existen los ascensores sin espejos?
Naturalmente que existen. En realidad, los espejos causan un impacto o un efecto mayor en ascensores de tamaño reducido. Cuando son más grandes o si hablamos de ascensores exteriores con cristaleras que nos dejan ver el exterior, no existe la necesidad de añadir un espejo.
Por otro lado, los ascensores no han parado de evolucionar en los últimos años. Ahora son más precisos, circulan más rápido, hacen mayores recorridos y cuentan con mecanismos de seguridad más confiables. Ahora bien, hace tiempo que los espejos se convirtieron en un elemento clave en la cabina para proporcionar bienestar a los usuarios, algo que no ha cambiado.
No cabe duda de que a nivel estético, cumple su función a la perfección, aunque además de decorar el espacio, se trata de un componente muy funcional que presta un gran servicio.
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