Según un estudio realizado en 2019 por la Fundación Mutua de Propietarios en colaboración con COCEMFE, miles de personas viven confinadas en sus casas por la falta de accesibilidad del inmueble. Esto significa que, aproximadamente un 4% de los 2.5 millones de personas que sufren algún problema de movilidad, viven sin salir de sus hogares. Ahora bien, el porcentaje es mucho mayor cuando hablamos de personas que pasan mucho tiempo sin salir al exterior, en torno al 42%.
Aún queda mucho por hacer y la falta de adaptación en los edificios es una realidad que hay que combatir. Desgraciadamente, la escasez de ayudas para eliminar las barreras arquitectónicas no facilita el cambio.
El derecho a una vida independiente
Los autores del estudio llegaron a la conclusión de que el 18% de los edificios en los que residían personas con movilidad reducida carecían de ascensor. Esta situación preocupante provoca angustia y aislamiento, principalmente entre las personas de mayor edad.
Parece ser que la necesidad de instalar soluciones de accesibilidad se percibe de manera clara y tajante ante usuarios de sillas de ruedas. Ahora bien, los mayores sin silla o las personas que padecen alguna discapacidad orgánica, que también sufren dificultades a la hora de bajar las escaleras, normalmente son excluidos por las comunidades de vecinos.
La normativa vigente en España garantiza la accesibilidad completa al edificio, atribuyendo la responsabilidad a la comunidad de propietarios. Sin embargo, este estudio demostró que los edificios con mayor número de vecinos solían ser los que menos acciones de accesibilidad gestionaban. Además, prácticamente en la mitad de los casos no era atendida la petición de aquellos propietarios que solicitaban la instalación de alguna solución de accesibilidad.
En ocasiones, dada la enorme dificultad para entrar o salir, las personas con problemas de movilidad se sienten prisioneras en su hogar, algo que hay que cambiar urgentemente. Estos propietarios deben convertirse en personas autónomas, libres de ejercer cualquier derecho y de participar en una sociedad de condiciones igualitarias.
¿Qué se necesita para mejorar las condiciones de accesibilidad en edificios?
Tanto la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica como la Fundación Mutua de Propietarios reclaman la instauración de un fondo estatal para fomentar la accesibilidad universal. Y es que para resolver la situación y que las comunidades de vecinos puedan afrontar las consecuentes obras o reformas, resulta imprescindible contar con ayudas específicas.
La regulación sobre accesibilidad ha avanzado notablemente en los últimos años. La instalación de un ascensor pasó de requerir la mayoría de votos de la comunidad a ser un requisito obligatorio cuando uno de los residentes sufra una discapacidad superior al 33% o sea mayor de 70 años. Ahora bien, la ONU resolvió en su informe, en mayo de 2019, que las medidas adoptadas en España eran insuficientes e ineficaces. De hecho, recomendaba la adopción de políticas eficaces y el aumento de asignaciones presupuestarias.
Son muchos los afectados por problemas de adaptabilidad que necesitan la ayuda de otras personas para salir a la calle o que incluso han tomado la decisión de cambiar de domicilio. Al ver reducida su calidad de vida, la mayor parte de estas personas se sienten mal consigo mismas, algo que lastima su autoestima y bienestar emocional.
Con el tiempo se han implantado mejoras, pero se necesitan nuevas fórmulas, ayudas e incentivos para acabar con las limitaciones y que los edificios de España sean plenamente accesibles.
Excelsior ofrece múltiples soluciones para que estas personas puedan acceder cómodamente a sus viviendas. Tenemos en cuenta diferentes escenarios y valoramos cada caso para ofrecer la solución idónea que acabe con las barreras arquitectónicas que coartan la libertad y frenan la autonomía.
No siempre es fácil, pero hacemos todo lo posible por acabar con los obstáculos insalvables en el hogar. Nuestra prioridad son las personas que, por circunstancias de la vida, padecen algún tipo de discapacidad y necesitan desplazarse de forma natural. Al diseñar nuestros productos, pensamos en ellos, sin dejar de cumplir con la legalidad existente en este tipo de instalaciones.
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