A la hora de planear un viaje, las familias encuentran numerosos problemas a tener en cuenta: ¿Qué hotel escoger? ¿Qué presupuesto tengo? ¿Cuántos días estaremos?, etc. A estos problemas, hay que añadirle el que tienen algunas familias que cuentan con algún miembro con algún tipo de discapacidad o dificultades para acceder a las instalaciones.
Si un hotel no cuenta con las medidas adecuadas de accesibilidad es muy probable que una familia que estuviese considerando su alojamiento en sus instalaciones, descarte la opción y decida optar por otra alternativa. Si, por el contrario, cuenta con estas medidas, se le conoce como un hotel accesible u hotel para todos.
¿Qué son los hoteles accesibles?
Pero, ¿a qué se refiere esto de hotel accesible? Un hotel accesible es un edificio que se encuentra adaptado en sus diferentes estancias para que personas con algún tipo de incapacidad física, por ejemplo ir en silla de ruedas, pueda acceder con facilidad. No solo vale con el acceso al hotel y a su hall principal, sino que también ha de contar con medidas para acceder a las habitaciones de manera sencilla y sin esfuerzos.
Optimizando la accesibilidad a los espacios del hotel, conseguimos que sea apto para el máximo número de personas posible, para que puedan tener total confort y seguridad. La idea de estos hoteles es que no solo consiste en adaptarse al marco normativo, sino ir más allá y adaptar el servicio para demostrar los beneficios de tu establecimiento frente a otros.
Eliminando dificultades, barreras u obstáculos como pueden ser pasillos muy estrechos o largos tramos de escalera sin rampas o plataformas salvaescaleras, permitirás que todos tus clientes tengan las mismas oportunidades.
Accesibilidad es sinónimo de calidad, por lo que ha de convertirse en uno de los elementos clave a incorporar en los servicios que ofrece tu hotel para poder otorgar la mejor experiencia a todos los usuarios.
Tipos de dificultades a salvar en hoteles
Existe una tendencia generalizada a pensar que, al hablar de accesibilidad, únicamente se tiene en cuenta a personas con movilidad reducida en sillas de ruedas. Sin embargo, existen diferentes tipos de dificultades a tener en cuenta a la hora de hacer un hotel más accesible, por lo que incluimos algunos ejemplos a continuación:
- Personas con movilidad reducida en silla de ruedas.
- Personas con dificultad en el desplazamiento: Problemas en las piernas o cadera, personas con necesidad de bastón, etc.
- Personas con visión reducida / invidentes: Un largo tramo de escaleras o un lugar muy estrecho también pueden suponer problemas para estas personas.
- Personas con discapacidad intelectual.
- Personas con carritos o coches para bebés.
Además de las ya mencionadas, es necesario contar con un hotel accesible, no únicamente para personas con cualquier tipo de dificultad física, sino también para clientes que traigan muchas maletas, o estas sean muy pesadas, por ejemplo.
Por tanto, los beneficios de un hotel accesible son muchos, y aportarán un valor añadido al servicio otorgado, dando más oportunidad a todos los clientes que quieran alojarse en tus instalaciones.
¿Qué debe tener un hotel accesible?
A continuación te mostramos algunos de los elementos básicos que harán que el establecimiento sea más accesible y seguro para todos:
Parking
Si el hotel cuenta con un aparcamiento privado, debe contar con una plaza reservada por cada 50, situándose lo más cerca posible de la entrada principal. Estas zonas han de estar siempre bien señalizadas y diferenciadas con el Símbolo Internacional de Accesibilidad.
Acceso entrada principal
El desplazamiento desde el parking a la entrada principal contará con el menor desnivel posible. De tener que subir algún tramo de escaleras para acceder a él, deberá contar con una solución de accesibilidad, ya sea un ascensor, una plataforma salvaescaleras o, en su defecto, con una rampa o rampa oculta automática. Dado que las rampas han de cumplir con ciertas medidas de seguridad y una serie de requisitos en función de cada caso, te dejamos un artículo donde explicamos en detalle la normativa y cómo ha de ser una rampa de accesibilidad.
Mecanismos de elevación
En caso de existir desniveles, pueden salvarse tanto con sillas como con plataformas salvaescaleras, entre otros, para permitir un acceso seguro a todos los usuarios. A continuación, te compartimos las diferentes opciones que se pueden aplicar en esta situación.
- Las sillas salvaescaleras pueden instalarse tanto en tramos rectos como en tramos curvos, incluso en piscinas, consulta con nuestro especialista si es una opción para tu supuesto.
- Las plataformas salvaescaleras pueden ser verticales o inclinadas (para tramos de escalera curvos o con cambio de pendiente, o tramos de escalera de trazado recto).
Descubre qué solución se adapta mejor a tu caso concreto a continuación:
Pasillos
Los pasillos han de ser lo más amplios posibles disponiendo de un espacio suficiente como para realizar un giro de una silla de ruedas para cambios de sentido. Es importante también que, en caso de ser un pasillo estrecho, tanto extintores como radiadores u otros elementos, se sitúen en un mismo lado.
Además, en caso de tener moquetas o alfombras, han de estar bien sujetas al suelo para evitar que se levanten al pasar por ellas tanto con una silla de ruedas como cualquier otro usuario caminando por encima de las mismas.
Habitaciones accesibles
El ancho libre mínimo de la puerta ha de ser de 80 cm (edificios históricos) o 90 cm en el resto. La cama no debe situarse a una altura inferior a los 45 cm ni superior a los 50 cm. Al igual que sucedía con el pasillo, las habitaciones deben contar con un espacio suficiente como para poder realizar un giro con una silla de ruedas.
Para ello, el mobiliario se ha de colocar de manera específica, con puertas preferiblemente correderas o plegables. Además, el suelo ha de ser liso y antideslizante, sin obstáculos.
Baños
Todos los elementos que incorpore el baño han de garantizar un uso sencillo y estar colocados a una altura adecuada, entre los 90 y los 120 cm sobre el suelo.
El lavabo ha de colocarse a una altura de 85cm y disponer de espacio libre en su parte inferior, con el objetivo de permitir la entrada de una persona en silla de ruedas. Además, el suelo ha de ser liso y no deslizante tanto en seco como en mojado.
Por otro lado, el inodoro será de entre 45 y 50 cm, dejando un espacio libre para hacer la transferencia lateral. Además, se ha de incorporar dos barreras de apoyo, una fija y otra abatible.
Restaurante, comedor y cafetería
La entrada ha de ser accesible, sin escalones ni desniveles, o con elementos que los salven. Además, las mesas y sillas han de colocarse de manera que se permita el acceso de una silla de ruedas y dejando un pasillo libre para su paso. En caso de ser externo al hotel o de situarse fuera del mismo, te recomendamos que leas este post sobre accesibilidad en bares y restaurantes accesibilidad en bares y restaurantes.
Si quieres hacer que tu hotel sea más accesible para todos los usuarios, contacta con nosotros y te ayudaremos a encontrar la mejor solución de accesibilidad para tu caso particular: