Los mecanismos de seguridad son un elemento imprescindible para evitar accidentes. Cada uno de ellos tiene un papel crucial. Pero, ¿cómo funciona el paracaídas en un ascensor? Su función es frenar la cabina cuando se produce un exceso de velocidad o la rotura de los órganos de suspensión.
El paracaídas: limitador de velocidad en un ascensor
El paracaídas trabaja junto a otros dispositivos de seguridad, como es el limitador de velocidad. Actualmente, todos los ascensores cuentan con un circuito de seguridad. Este detiene la cabina cuando la velocidad supera la cantidad establecida de metros recorridos por segundo.
Este circuito de seguridad consta de dos poleas. Una superior, que actúa como limitadora de velocidad y otra, inferior, tensora del limitador.
En caso de que la cabina supere la velocidad establecida, tanto la polea del limitador como el cable se bloquean y detienen así la cabina.
El limitador de velocidad es el elemento que provoca el accionamiento del paracaídas. Cuando el elevador supera el 15% de su velocidad media, activa el sistema de seguridad mencionado, para reducirla.
El paracaídas es un dispositivo mecánico que se sitúa preferentemente en la parte inferior. Una vez activado y después de su bloqueo, el sistema continuará en condiciones óptimas para seguir funcionando.
Su instalación es fundamental, pues evita que el ascensor se descontrole y descienda a una velocidad irregular.
Otros elementos de seguridad en un ascensor
Además del paracaídas, existen otros elementos de seguridad para evitar riesgos eléctricos, sobrecargas de tensión, caídas bruscas o desplomes.
El detector sísmico es un sensor que controla el comportamiento del ascensor ante movimientos sísmicos. Cuenta con un elemento vibratorio que detecta los movimientos que superan al ajustado. Este tipo de detectores deben ser instalados en todos los países con actividad sísmica.
Por otra parte, los amortiguadores son otro elemento obligatorio. Detienen el contrapeso o la cabina en caso necesario. Suelen instalarse al final del recorrido de la cabina o en la parte inferior del bastidor.
Los amortiguadores cuentan con un dispositivo eléctrico de seguridad que impide el funcionamiento del aparato hasta que no regrese a sus posiciones habituales.
El ascensor cuenta con un intercomunicador, puedes emplearlo. En caso que no funcionara, puedes utilizar tu propio dispositivo móvil y llamar al 112, emergencias o a la empresa de mantenimiento encargada de la instalación.
El número de teléfono se encuentra en un adhesivo en el interior de la cabina. Cabe mencionar que si se llama al servicio de bomberos, el cargo del servicio caerá sobre el propietario del ascensor.
Estos componentes son esenciales, pero también es necesario respetar las normas básicas de uso. Por ejemplo, verificar que las puertas de la cabina estén cerradas o no sobrepasar la capacidad de peso máxima.
La inspección técnica y los sistemas de seguridad
Para asegurar que estos sistemas de seguridad funcionen adecuadamente, es importante la Inspección Técnica de Edificios (ITE).Es una inspección obligatoria para los edificios de más de 50 años de antigüedad.
También los inmuebles que están acogidos a ayudas de la Administración Pública de la Comunidad Autónoma competente.
Busca garantizar la seguridad y salubridad del edificio. Evalúa el estado de conservación, la eficiencia energética y las condiciones de accesibilidad. Para ello inspecciona diferentes espacios como las escaleras o los accesos, y también el estado mecánico del ascensor.
Esto incluye el limitador de velocidad, los frenos, la suspensión y tracción, las puertas y cierre, los amortiguadores, el dispositivo de socorro y el paracaídas, que ya se ha mencionado cómo funciona en un ascensor.
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